Dejar atrás los treinta
Te puedo decir que no me place,
que no me hace feliz pasar los treinta
y ver como me dejo en el camino
mi gracia, mi frescura y mi inocencia.
Te tengo que admitir que ya voy tarde,
que no cumplí unos cuantos de mis sueños,
las deudas que hace tiempo te juraba
se van acumulando sin remedio.
Te tengo que pedir que me recuerdes,
lo que te dije en un banco del recreo,
entre las diez y diez y las y media,
son promesas que casi ni recuerdo.
Te tengo que contar que no estoy ciego,
que tengo en la balanza otros consuelos
pero pasan los años y estoy lejos,
de dar por por satisfechos mis deseos.
Hoy tengo treinta años y mi bolsa,
no está desierta de errores y de aciertos
pero haré treinta y dos y para entonces,
juro que habrá de estarlo mucho menos.
Paloma, ya te llamo para la animación.
4 comentarios:
Esta letra sí que te la robo... Lo del recreo me ha matado... No voy a decirte que es tu mejor escrito, pero no anadará lejos de los primeros puestos. Grande.
No hombre, no seas negativo,aunque las musas siempre lo son, evidentemente si echas la vista atrás, a tu vigesimoprimer cumpleaños, con respecto al del viernes que viene, se pierde frescura y espontaneidad, y esa forma de ver las cosas que solo se tiene una época en la vida, pero mira también lo que has conseguido y evolucionado, vives independiente, elegiste y aún eliges tu propio camino,compartes tus días con quién tu quieres, no das cuentas de entradas ni salidas,... y lo que es fundamental, el sábado te tomarás los sandavid con los mismos que estaban en ese banco en San Pablo unos, en el Alfonso otros y todos en el Azarbe. Desgraciadamente la resaca del domingo se llevará mucho peor que cuando hacíamos nuestros clásicos hack trick.
sí, yo también te veo un poco negativo y pesimista...
Para los que se quejan otra visión. Pero no lo habéis pillado, es más bien un acto de fe en plan no me quejo en exceso, pero este año va ser mucho mejor, lo juro por Arturo.
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