19/7/07

Al otro lado de la carretera

Los que hacemos todos los días la subida del puerto de la cadena sabemos mucho de atascos (y de ingeniería de caminos).

Aproximadamente un tercio de los atascos se producen porque un camión trata de arrastrar una pared de hormigón del tamaño de Molina desde Murcia a Cartagena y cuando llega la hora de subir el puerto el motorcico va pa allá pa arriba diciendo aaaaay....aaaay, y ahí que vamos todos detrás del camioncico conmemorando su procesión y martirio y mentando a los santos, a los muertos y a cristo, que es lo que se viene haciendo en las procesiones.

Otro tercio son accidentes que se producen de aquí a Cartagena, casi todos porque alguien no se ha quitado bien las legañas (o le han crecido nuevas) y a mitad de procesión, más pensando en cristo y en la puta madre que le parió (o sea en la virgen) que en la circulación, le da un besico al de delante. Una mierda de roce con los parachoques!, que no te digo yo si hubiera lengua o algo, pero una mierda de piquico y allí que tienen que pararse y ¿dónde se van a parar? pues en lo más ancho claro, en "to el medio" del carril.

El último tercio son accidentes que se producen viniendo de Cartagena aquí. Es ver jaleo en la acera de los invertidos y allí que nos asomamos todos como cuando hay pelea en los bares. Qué pasa, qué pasa? (estirando el cuello como el bully de willy fog).
Pues nada que es ver el accidente y el coche, como que solo, pasa 140 a 60 en menos de 3 segs, lo que aumenta notablemente las probabilidades de escarceo con el culico del de enfrente claro.

Hoy me he cruzado con un par de coches estrellados, dos camiones de bomberos, un ambulancia, un guardia civil, un atasco sentido murcia de tres pares de huevos y dos mil millones de viciosos mirando desde mi carril y besando culicos.

La solución a este problema es, en mi opinión, clara. En todas las rotondas estas que están poniendo, en vez de esculturas que no comprende ni dios, que pongan accidentes, con sangre y ambulancias, y bomberos y extraterrestres abudicendo cadáveres y.... Así la gente a fuerza de mirar se acostumbra y al final ni mira. No, en serio que te acostumbras. Yo ahora, después de un par de años subiendo el puerto, me cruzo con con cuatro tios partiéndose los dientes para dilucidar quién tuvo la culpa y ya ... pues como quien ve una rotonda.